Recuerdos de Eduardo Parreño
Descansa en paz, bajo la luz de Dios.

El aroma del cacao, de la naranja y de la tierra húmeda siempre llevará su nombre.
El cacao fue su herencia, el demagallar su oficio, y la cosecha su manera de darnos amor.

Con Rosita después de muchos años de amor y compañía, sellaron su unión con el matrimonio, mas felices que nunca

La palabra que mejor lo describiría es "Forjador"
Porque forjo con sus manos la tierra, con su esfuerzo la familia, y con su amor un legado.